LAS ELECCIONES Y EL FEDERALISMO

1 de noviembre de 2023

 

 

Moneda riojana

Escribimos antes de las elecciones que determinarán quien será el nuevo presidente de nuestro país, y habiendo presenciado todo el proceso preelectoral, y analizado las definiciones de todos los candidatos y partidos políticos.
Una primera observación nos lleva a confirmar el rol determinante que tiene Buenos Aires, la CABA y el AMBA en la configuración electoral y en el número de votantes.
Una confirmación del peso “específico” y político que conlleva una metrópolis de 20 millones de habitantes o algo más. Como hemos analizado aquí en sucesivos análisis. Que aconsejamos releer.
En las declaraciones y los debates de los candidatos, sólo el gobernador de Córdoba reclamó la necesidad de un Federalismo que cambie la concentración económica en beneficio de BUENOS AIRES, ciudad y provincia; concentración estatal que insume enormes proporciones del Presupuesto nacional.
Un gobierno nacional, provincial y de la CABA que concentran decenas de miles de empleados en la burocracia estatal.
Solamente las carreteras y caminos que demandan los Partidos de la provincia y las obras en la Ciudad, capturan los mayores recursos provenientes de los impuestos nacionales que paga todo el país.
Los ferrocarriles metropolitanos y las líneas del subterráneo consumen más energía que provincias enteras cada día. Energía que proviene desde el Chocón, Yacyretá y Salto Grande.
El consumo energético diario de la CABA y el AMBA superan cada día al consumo de varias provincias que carecen de generación propia. Porque es un país unitario y todas las grandes obras realizadas convergen en la demanda de la gran concentración.
Como el gasoducto NK para satisfacer primero, la enorme demanda de la CABA y el AMBA, que hasta la fecha implica la importación de gas licuado por U$S 5.000 millones, que indirectamente paga todo el país. Todas las obras que hemos descripto en diversas notas, como la elevación de los ferrocarriles metropolitanos en la Ciudad, el túnel paralelo a Puerto Madero, o la construcción del complejo cultural NK que demandó ingentes recursos de la Nación; hasta la “puesta en valor” de la Confitería El Molino del Congreso, todo con recursos nacionales.
Porque la estructura impositiva que recauda la Nación, deriva también del puerto de Buenos Aires como en los orígenes de la Nación y ahora de los puertos de la Hidrovía del Paraná, donde se concentran todas las multinacionales exportadoras; porque Argentina disolvió en los ’90 la Junta de Granos y la Flota Mercante del Estado.
Por otra parte, la corrupción paraestatal/ empresarial que hemos presenciado en las últimas décadas, de distintos gobiernos,
se muestra en toda su magnitud en la captación de recursos del juego: los bingos, los casinos y las Loterías que derivan recursos a la “política”.
Y el narcomenudeo que se muestra cada día en el Gran Buenos Aires y las Villas de la Ciudad, que controlan 120.000 policías de la Provincia y 35.000 de la Ciudad, de 200 kilómetros cuadrados, oscurece el tráfico del gran lavado de la droga que se derivan en gran medida en inversiones inmobiliarias, barrios cerrados en el Gran Buenos Aires como Nordelta, Pilar, Canning, y a la vera de las autopistas a La Plata, la del Oeste y la Panamericana hasta Rosario. Y los peajes que derivan recursos a la empresa privada y al gobierno nacional.
Donde la corrupción paraestatal y privada de grandes empresas constructoras, cuyos dueños confesaron en el caso de “los Cuadernos”, causa que “duerme” en los estrados judiciales, como numerosas causas de la corrupción a lo largo de los últimos cuarenta años. Como dormirán la causa de los cajeros del Banco de la Provincia y de la Intendencia de Lomas de Zamora, que muestran claramente los desvíos de recursos estatales como los Bingos, Casinos y Loterías que expolian los bolsillos y las esperanzas de la pobreza popular.

La “City”

Y está claro: Buenos Aires es una hermosa “City” que se extiende en el corredor desde Barrio Norte, y Recoleta por la Libertador, que corre hasta el Tigre. Espacio donde se contrapone la riqueza de las clases ricas y “pudientes”, con el trabajo diario de la pobreza en todos los intersticios de esas riquezas.
Buenos Aires es una hermosa ciudad exceptuando las “villas” en las riberas del Riachuelo, o Villas como la “31” al lado de la Terminal de ómnibus, con 45.000 residentes en viviendas muy precarias, sin aguas corrientes, y del otro lado del lujoso barrio Puerto Madero.
Que muestran las tragedias del narcomenudeo y un muestrario de la pobreza de trabajadores “autónomos” que demanda la gran ciudad.
Ciudad visitada por más de 40.000 turistas extranjeros por mes, y de provincias, de latinoamérica y Europa que dejan divisas y disfrutan de los mejores restaurantes, y espectáculos musicales, culturales y teatrales, y un pueblo que llena los estadios de fútbol cada semana.
Buenos Aires es una Ciudad “rica” en muchos sentidos; siempre lo fue, pero ahora está llegando a una situación de colapso “urbano”, contaminada con el CO2 de una masa vehicular que supera la superficie vehicular de gran parte de la CABA. Porque es una ciudad cuadrilátera que no puede ampliar sus calles y no hay lugar para nuevas plazas o espacios verdes. Donde siguen creciendo los edificios en altura con una masa crítica de habitantes que tienen que alquilar su vivienda. Y una Ciudad universitaria con más de 350.000 estudiantes de Capital y Partidos del AMBA.
Pero Buenos Aires es una ciudad muy “cara” comparativamente con las provincias por el costo de su propia concentración y diversificación de oferta y demanda, por cuanto la capacidad económica de la mitad de la población pertenece a un nivel económico superior.
También es la ciudad donde numerosos científicos, ingenieros, médicos y trabajadores especializados, músicos y artistas que trabajan en importantes institutos, el cine y el espectáculo . Y grandes canales de televisión sostenidos por la masa publicitaria de las grandes empresas privadas y del Estado.
Una Ciudad con muchos contrastes de la riqueza y la pobreza y donde también se ha desarrollado la gran prostitución que revela también el consumo de diversas drogas, como revela el caso Saenz Valiente y numerosos casos de homicidios, robos e inseguridad.
El atentado criminal contra la Vicepresidenta, todavía no esclarecido, y muchos casos desde Nisman a la fecha, revelan la situación que vivimos con una Justicia comprometida con los poderes de turno.
Buenos Aires es la sede de las más grandes empresas y bancos extranjeros y nacionales; de los grandes terratenientes de la pampa agroganadera de la Sociedad Rural, bien cerca del poder político.
Es una Ciudad extendida y unida por la General Paz, a los Partidos que limitan el Riachuelo y del Gran Buenos Aires, desde Avellaneda, Quilmes, Lomas, Lanús, La Matanza (casi dos millones de habitantes) y de allí hasta el Tigre, conformando una metrópolis unida tanto en el poder económico industrial como en las relaciones comerciales y de negocios.
Pero a medida que crece ese “Gran Buenos Aires”, muestra los vacíos, la inequidades, la pobreza, las viviendas más pobres y sobre todo la existencia de cientos de hectáreas ociosas que son el resultado de sucesiones y divisiones de otrora dueños de esas tierras. Por otra parte, la CABA no es industrial, no exporta, solo intermedia e importa, porque no tiene una estructura industrial como las provincias de Córdoba, Santa Fe, Tucumán, o Mendoza. Ni agricultura como la provincia, ni minería como las provincias. Es sobre todo intermediaria y financiera.
La comparación del poder económico y político-estatal de la CABA con las provincias argentinas más perjudicadas como las del NOA o el NEA es el resultado del triunfo del Buenos Aires unitario y portuario en Pavón. Si hasta el nombre de Plaza Miserere pasó a ser Once de Setiembre por la creación de Mitre del Estado de Buenos Aires y la separación de la Confederación Argentina.
Se abre hoy en nuestro país, un nuevo período histórico en una situación crítica, grave en lo económico, donde las voces que reclaman el Federalismo son apenas perceptibles.
Pero veremos en el primer debate sobre el Presupuesto nacional 2024 cómo se distribuirán los recursos nacionales que se destinarán a las obras públicas en la CABA y el AMBA con los destinados a las provincias.
Un proyecto federal permitiría crear un nuevo país, mucho menos concentrado como es hoy, y un nuevo proceso de reindustrialización nacional en todo el país, que permitiría desconcentrar la CABA y los grandes Partidos del Gran Buenos Aires. Y dejar de ser una Neocolonia agropecuariaminera dependiente y endeudada.
Nuestra historia.delarioja nació hace una década tratando de crear un gran Movimiento que luche por un Federalismo real porque creemos y sostenemos que en gran medida, la crisis económica argentina, la gran concentración y su expresión política, es el resultado del triunfo del unitarismo portuario desde Pavón en adelante.
Como expresa el escritor riojano Ranulfo Bazán en su obra “400 años de minería riojana”, la gran minería del oro y la plata del Famatina fue abandonada y descartada por el triunfo de la economía agroganadera, unitaria y portuaria de Buenos Aires. Y quedó abandonado, el Cable carril Santa Florentina que es testigo del triunfo porteño.
Las grandes obras públicas deben ser el resultado de planes nacionales, planificados por el Estado pero con tratamiento del Congreso. Porque el Estado no es el Gobierno nacional de turno, sino que es el Parlamento el que debe aprobar un plan nacional que responda a las necesidades más importantes de toda la Nación tanto en materia petrolera, minera, energética, rural, carreteras, ferrocarriles, Astilleros, caminos, represas, etcétera, para que el desarrollo sea en todo el país con la participación de las provincias. De otro modo, un presidente y un ministro de cualquier gobierno puede decidir qué obra realizar con fondos de toda la Nación, como viene sucediendo.

Y 100 años después las voces centralistas nos hablan del “milagro” del litio y Vaca Muerta como salvavidas de la crisis.
Son muchos los problemas que padece hoy nuestro país, en un mundo en guerra, más convulsionado y más desigual. Con una deuda externa impagable con los actuales “números” del déficit entre exportaciones e importaciones, que hacen que la crisis se ahonde y el presagio de luchas internas se agudicen y se agraven.-
Bs.As., 1ª de Noviembre 2023